Fin del ‘monrealato’ en la Cuauhtémoc… y más

Fin del ‘monrealato’ en la Cuauhtémoc… y más

Pero hay otra derrota para Monreal en este proceso electoral que es peor, por lo simbólica: le ganaron a su sobrino la elección para presidente municipal de su tierra, Fresnillo, Zacatecas, donde ganó el candidato de la coalición PAN, PRI y PRD. FOTO: Facebook Catalina Monreal

Mensaje Político

Alejandro Lelo de Larrea

La entrega de la Constancia de Mayoría como alcaldesa de la Cuauhtémoc para Alessandra Rojo de la Vega marca también el final del ‘monrealato’ en esa demarcación territorial que dominó durante casi 10 años el todavía senador Ricardo Monreal. Al mismo tiempo es otro severo golpe para el zacatecano, de quien dicen los morenistas que está pagando las facturas de haber operado contra la 4T en la Ciudad de México, en los comicios de 2021 y en otros momentos.

Pero hay otra derrota para Monreal en este proceso electoral que es peor, por lo simbólica: le ganaron a su sobrino la elección para presidente municipal de su tierra, Fresnillo, Zacatecas, donde ganó el candidato de la coalición PAN, PRI y PRD.

Desde 2018 hubo acciones de Monreal contra Claudia Sheinbaum. Por ejemplo, cuando acusó que ella no había ganado la encuesta para ser candidata de Morena a la Jefatura de Gobierno, sino que fue él, lo cual era cierto, porque en esos momentos venía de ser jefe delegacional en la céntrica Cuauhtémoc. Eso le molestó a López Obrador, y más que Monreal amenazó con irse a la oposición para que perdiera Sheinbaum. Era un riesgo. Monreal los tenía contra la pared y por eso López Obrador le ofreció como compensación ser el coordinador de los senadores de Morena. Pero también se la guardó. Sheinbaum no lo perdonó y menos los “duritos”, que le hicieron la guerra en el Senado, encabezados por Martí Batres.

Para el proceso electoral de 2021, López Obrador le dio la instrucción a Monreal de no meterse en la CDMX, porque todo lo haría Sheinbaum, quien hizo a un lado a toda su gente. Para empezar, no permitió que se reeligiera Néstor Núñez –entonces subordinado político de Monreal– al frente de la Cuauhtémoc. Monreal negoció con la oposición para poner como candidata de PAN, PRI y PRD a Sandra Cuevas, quien le ganó a la morenista Dolores Padierna, lo que propició que su esposo, René Bejarano, advirtiera que se la iban a cobrar a Monreal, “por haber traicionado al movimiento”.

En 2022, Monreal coqueteó con buscar la candidatura presidencial de oposición, pero los panistas lo rechazaron. En 2023 se coló en la interna de Morena, pero su papel fue desolador: quedó en último lugar de seis aspirantes. Pensó que a cambio lo podían hacer candidato a la Jefatura de la CDMX, pero también los duritos se desquitaron y le cerraron el pasó. Negoció con la propia Sheinbaum que hicieran a su hija Catalina Monreal candidata a la Alcaldía Cuauhtémoc, a lo que accedió, e incluso le dieron todo el respaldo –al menos en público– Clara Brugada y Omar García Harfuch, entre otros.

Cuando arrancaron las campañas, Catalina iba en primer lugar en las encuestas, pero fue resultando mejor candidata Rojo de la Vega, quien junto con su estratega Obdulio Ávila se percató que en esa demarcación Ricardo Monreal tenía un rechazo enorme, por lo que enfilaron sus baterías por ahí: hay que acabar con el monrealato en la Cuauhtémoc, lo que le afectó completamente a su hija.

Ir contra el monrealato también sirvió para atraer el apoyo de diversos sectores y mucha gente muy molesta con Monreal, de manera destacada Padierna y Bejarano, con quien por cierto se reunió y se tomó una foto 10 días antes de las elecciones, pero que el día de la elección le operó en contra. Monreal será diputado federal y hasta hoy tiene muy pocas posibilidades de ser el coordinador de Morena. Lo veremos.

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