
La vida en rosa de Nancy en Azcapo
La alcaldesa de Azcapotzalco, Nancy Núñez, llevó a sus porristas acarreados a las puertas del Congreso de la Ciudad de México, ante quienes al salir gritó: “¡Ganamos esta comparecencia!”. ¿Ganamos? ¿A quién le ganaron? ¿Contra quién compitieron? En realidad, casi nadie la cuestionó. FOTO: Especial
Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
La alcaldesa de Azcapotzalco, Nancy Núñez, llevó a sus porristas acarreados a las puertas del Congreso de la Ciudad de México, ante quienes al salir gritó: “¡Ganamos esta comparecencia!”. ¿Ganamos? ¿A quién le ganaron? ¿Contra quién compitieron? En realidad, casi nadie la cuestionó.
En lo que podría decirse que sí ganaron es en cinismo, porque a pesar de que el retroceso en la demarcación es evidente en los primeros siete meses de su administración, ella ofreció cifras, datos e historias de la vida en rosa en Azcapotzalco, algo así como chintololandia.
La alcaldesa de Morena compareció este martes en el Congreso de la Ciudad de México, como parte de la ronda a la que asistirán los 16 ediles, para hacer un balance, rendición de cuentas de lo que han sido sus primeros siete meses de gobierno.
La mala gestión de Nancy Núñez en Azcapotzalco tiene al menos dos razones fundamentales. La primera, su formación: es profesionista egresada de la licenciatura en comunicación de la FES Acatlán, pero no tiene ningún estudio, ni experiencia previa ni preparación en administración pública. Una cosa es hacer porrismo en la universidad y grilla en el Congreso, y otra mucho muy distinta administrar una Alcaldía.
Ante la falta de experiencia, Núñez podría tener la visión para conformar un equipo de trabajo técnico, especializado en las distintas áreas y necesidades de Azcapotzalco, lo que le permitiría dar resultados. Tampoco lo ha hecho: en tan sólo siete meses de gobierno, ha removido a unos 10 directoras y directores generarles y de área. Absoluta inestabilidad en su equipo de gobierno. ¿Por qué será?
Los peores resultados que le hicieron notar los diputados a Nancy Núñez son en materia de seguridad. En primer lugar, la encuesta en que el INEGI reporta un incremento en la percepción de inseguridad. Cuando ella recibió la demarcación, el 1 de octubre, el 50.6% de la gente se sentía insegura. Para diciembre, ya había aumentado al 56.7%, y al corte de marzo alcanzó 61.9%. Es decir, un aumento del 22%, comparando el global de octubre a marzo. Además, en el cuarto trimestre de 2024 dejaron de transitar en las calles cercanas a su vivienda el 45.3% de los habitantes de la demarcación, por temor a la inseguridad.
Le pregunté sobre este aumento en la percepción de inseguridad y desdeñó la opinión de la gente, sin valorar que percepción es realidad. Aseguró que se han reducido 14% los delitos en Azcapotzalco en estos meses, pero según ella le hace falta difundirlo. O sea, la alcaldesa es comunicóloga y no sabe comunicar. Eso explica por qué tampoco puede con lo demás.
Los otros datos, las estadísticas reales que evidencian aumento en la inseguridad los aportó la diputada Laura Álvarez, del PAN. La tasa de peligro ante la delincuencia pasó de una incidencia mensual de 191 víctimas por cada 100 mil habitantes, cuando el gobierno anterior cerró en 187. La organización civil “Semáforo Delictivo” reportó que en la última semana de abril Azcapotzalco registró más homicidios dolosos que en todo el 2024.
También le recriminó la diputada Álvarez a la alcaldesa el aumentó del 20% en robo de vehículos; 5.77% el robo con violencia; el 35.19% el robo a negocios y el 40% el robo en transporte público. Ojalá que Núñez acepte que con ella ha empeorado Azcapotzalco, porque sólo a partir de tener un diagnóstico real, de aceptar la cruenta realidad podrá corregir el rumbo. Lo veremos.