La mortal oscuridad en Iztacalco

David Polanco / CDMX Magacín

Aunque el alcalde de Iztacalco, Armando Quintero ha presumido durante sus cuatro Informes de Gobierno que iluminó en su totalidad las calles de la Demarcación Territorial, la oscuridad en las avenidas Viaducto y Añil, pudo ser causa fundamental por la  cual dos jóvenes no vieron una coladera destapada y cayeron en ésta, lo que les causó la muerte.

En Iztacalco, también la falta de alumbrado incide en la inseguridad pública: son ocho las colonias que están catalogadas como “puntos rojos” en la demarcación: Gabriel Ramos Millán, Ampliación, Gabriel Ramos Millán, Carlos Zapata Vela, Infonavit Iztacalco, Unidad Mujeres Ilustres, Tlacotal, Pantitlán y Juventino Rosas.

De acuerdo a la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana que hizo el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en el tercer trimestre del 2022, la alcaldía Iztacalco es una de las que más les hace falta luminarias, según el 59.1 por ciento de habitantes.

Vecinos señalan que es importante renovar el alumbrado público y cuidar que funcionen los botones de pánico que han sido instalados en las calles de Iztacalco para abatir y denunciar el delito.

Otro de los grandes problemas desde que comenzó el mandato de Armando Quintero al frente de la alcaldía Iztacalco, en octubre de 20128, es el robo de coladeras, un delito recurrente en la demarcación que ha provocado accidentes de peatones, ciclistas y automovilistas.

Sin embargo, pese a que se ha exhortado al Sistema de Aguas y a la Secretaría de Obras del gobierno CDMX, así como al alcalde atender solicitudes vecinales y reponer las tapas y rejillas faltantes en las vialidades de esta demarcación, las autoridades desoyen las solicitudes ciudadanas.

Ante esto, la alcaldía Iztacalco informó que tienen pendiente por atender en la plataforma del Sistema Unificado de Atención Ciudadana SUAC, cerca de 201 reportes, la mayoría por coladeras faltantes.

Desde el año pasado, grupos vecinales propusieron evaluar la posibilidad de cambiar gradualmente esta infraestructura de hierro por otra elaborada con materiales de plástico reciclado o concreto para evitar el robo. Además, solicitaron a la Secretaría de Seguridad Ciudadana y al Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano de la Ciudad de México (C-5), ampliar la vigilancia policial en las calles de esta demarcación para prevenir y evitar el robo de tapas, coladeras y rejillas.

Al trasladarse por la capital, a pie, en bicicleta o automóvil, es frecuente encontrar calles en las que falta esta infraestructura urbana, lo que pone en riesgo la movilidad de peatones y automovilistas, principalmente de adultos mayores y personas con discapacidad.

De acuerdo a las redes sociales, en los últimos meses han aumentado los reportes por robo de estos objetos en la alcaldía Iztacalco.

El jueves pasado, dos jovencitas fallecieron al caer en una coladera destapada, la cual no vieron por la oscuridad de la calle, mientras caminaban rumbo al discurso de Zoé, en Palacio de los Deportes.