Sandra Cuevas: ave de tempestades
Una de tantas razones por las que la alcaldesa Sandra Cuevas no es confiable ni para la alianza Va X la Ciudad de México, ni para Morena y tampoco para un amplio sector de Movimiento Ciudadano es que la falta de firmeza en sus posiciones y definiciones políticas. FOTO: X / Sandra Cuevas
Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
Una de tantas razones por las que la alcaldesa Sandra Cuevas no es confiable ni para la alianza Va X la Ciudad de México, ni para Morena y tampoco para un amplio sector de Movimiento Ciudadano es que la falta de firmeza en sus posiciones y definiciones políticas.
Por eso hay hasta quienes la llegan a comparar con Donald Trump –toda proporción guardada–, quien cuando era presidente podía lanzarse contra alguien por la mañana en su cuenta de Twitter, y ya por la tarde alabarlo. En otras palabras, Cuevas es un ave de tempestades, sus caminos son inexcrutables.
Un ejemplo: el lunes mandó al Congreso de la Ciudad de México su solicitud de licencia para separarse del cargo de alcaldesa y así competir –aunque sea de forma testimonial–, por un escaño en el Senado de la República, vía el partido Movimiento Ciudadano (MC). Al día siguiente, el martes, retiró esa petición. Hasta el cierre de esta columna no la había vuelto a presentar.
El anuncio de que será candidata de MC generó fuerte división al interior de ese partido, porque personajes como Patricia Mercado consideran que resta, en vez de sumar. Cuevas no tiene ni la más remota posibilidad de ser senadora, ni aunque fuera en la primera fórmula, porque MC será tercer lugar en la CDMX. En el peor escenario, la oposición ocupará ese segundo lugar y el escaño será para la priísta Cynthia López Castro. La segunda fórmula opositora la encabezará la perredista Verónica Juárez.
Es muy probable que los más felices de que Cuevas se vaya a una candidatura son los habitantes de la Cuauhtémoc, que enfrentan falta de atención de servicios, desde falta de poda de árboles, arreglo de banquetas, baches en vías secundarias, desazolve, agua potable. Ante esta crisis, ven escándalos y frivolidad de su alcaldesa: que sus guaruras golpean ciudadanos, que fantochea con vehículos caros no aptos para la CDMX; que reparte dinero; que se atavía con ropa y accesorios que rebasan los 200 mil pesos.
Al final ave de tempestades, el de Sandra Cuevas fue el primer caso en que el titular de una Alcaldía o su equivalente delegado enfrenta durante su mandato un proceso penal. Fue por golpear a dos policías de la auxiliar. Ese hecho generó otra falta de confianza sobre Cuevas: fue defendida a ultranza por los alcaldes panistas Lía Limón, Mauricio Tabe y Santiago Taboada, gracias a lo cual no fue ingresada a prisión y logró permanecer en el cargo. Pero le faltó gratitud.
No porque haya ambicionado ser la candidata de oposición a la Jefatura de Gobierno, sino por su reacción al no ser: junto con el alcalde de Cuajimalpa, Adrián Rubalcava, armó un show mediático para reventar a la oposición. Esperaban que Morena le diera alguna candidatura. Pero topó con pared, precisamente porque no es confiable.
A pesar de ello todavía intentó volver a la alianza Va X la CDMX para ver si aunque sea rescataba una diputación federal que le concediera fuero. Enfrentó un rotundo no, ante lo cual amenazó a Taboada que se va a encargar de que no sea jefe de Gobierno.
Hoy, todo apunta que la candidatura para Cuevas es una salida más o menos digna de la Alcaldía, para que la gente del senador Ricardo Monreal, su padrino político, se encargue de cerrar la administración y de pasadita ayude a la causa de Morena en la elección del 2 de junio. Apostamos triple contra sencillo que Cuevas terminará peleada con MC. Lo veremos.