Sheinbaum sí recapacita
A la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, hay que reconocerle que, a diferencia de su mentor, Andrés Manuel López Obrador, ella sí recapacita. Al menos lo hizo esta ocasión luego de que discriminó a un sector socioeconómico de sus gobernados, y de pasada se dio un balazo en el pie al atacar a los capitales.
Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
A la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, hay que reconocerle que, a diferencia de su mentor, Andrés Manuel López Obrador, ella sí recapacita. Al menos lo hizo esta ocasión luego de que discriminó a un sector socioeconómico de sus gobernados, y de pasada se dio un balazo en el pie al atacar a los capitales.
El tema fue por su expresión del lunes, que le generó una oleada de críticas en redes sociales, de organismos empresariales e incluso de los propios organizadores del Gran Premio de México de la Fórmula 1 de automovilismo, con todo lo que implica en servicios e inversiones a su alrededor, durante toda la semana y en especial del viernes próximo al domingo, día de la carrera.
El lunes, Sheinbaum dijo que no le gusta acudir a eventos como el de la Fórmula 1, porque lo considera “bastante fifí”, esa palabra que le copió a López Obrador para mofarse de la clase socioeconómica alta, esa para la que también gobierna, le guste o no, y aunque no voten por ella ni por su partido. Ya si le caen bien o mal, debería reservarse ese sentir.
“Estamos muy contentos de que la Fórmula 1 esté en la Ciudad de México”, expuso ayer. Luego, le quiso componer a lo del lunes: que se refirió a los boletos que le regalan al Gobierno de la CDMX, y que antes los altos funcionarios tenían el privilegio de utilizarlos. “Ahora los distribuimos para todos aquellos que difícilmente puede pagar un boleto de Fórmula 1… a eso nos referíamos, entonces, por supuesto que estamos muy contentos de que esté Fórmula 1 aquí”.
Acaso la secretaria de Administración y Finanzas del gobierno capitalino, Luz Elena González le hizo ver a Sheinbaum el error que había cometido con su expresión “fifí”, pues el 91 por ciento del Producto Interno Bruto de la CDMX proviene de la prestación de servicios, como todo lo que rodea a la Formula 1.
Quizá también Sheinbaum sí escuchó a empresarios, como los de la Coparmex CDMX, que previamente a la reconsideración de Sheinbaum habían destacado que la derrama económica que se espera este año por el Gran Premio es de unos 15 mil 500 millones de pesos. Ellos dicen que hay que sumar 55 mil millones de pesos que ya han dejado las ediciones anteriores de este evento internacional, desde su retorno a México en 2015.
“Bienvenida la Fórmula 1 a la Ciudad de México y la derrama económica que genera en beneficio de la Capital y de todos sus habitantes… Estos eventos, también como el de la NFL y el béisbol de Grandes Ligas, ayudan a aumentar el valor de la ‘marca país’ de México, valuada actualmente en 771 mil millones de dólares.
Mensaje Viral
A propósito de que ayer comentamos el señalamiento del secretario de Gobierno, Martí Batres, quien acusó que las críticas a Sheinbaum son por misoginia, nos escribió Gloria Amador, abogada especialista en derechos humanos con más de 20 años de experiencia en el servicio público en áreas de igualdad sustantiva y equidad de género, para decirnos que se equivoca Batres.
“La crítica hacia el trabajo de un servidor público no se puede ver como misoginia, ni como violencia de género, es parte del escrutinio al que está sujeta o sujeto una o un funcionario”, explica.
Ella considera que la misoginia tiene que ver más con temas en donde se discrimina a la mujer por razones de género, hablar de su físico, hacer distinción de su capacidad, su talento. “Eso sí es violencia de género, es misoginia, no lo que dice Batres”.
Ni siquiera se sostiene el argumento de que Sheinbaum es la más criticada por ser mujer, porque al percibirla como la rival a vencer en la contienda presidencial, la pusieron como tiro al blanco, como ocurrió en otros momentos cuando el favorito del presidente en turno era hombre.