La pandilla teotihuacana de Kike Vargas

La Semana Santa no sólo es de pescados y mariscos también son tiempos electorales. Resulta que Enrique (Kike) Vargas, el posible candidato del PAN a la Gubernatura del Estado de México y apasionado por los camarones a la diabla, está maniobrando para poner a los suyos en las presidencias municipales.

Redes Mexiqueñas

La Semana Santa no sólo es de pescados y mariscos también son tiempos electorales. Resulta que Enrique (Kike) Vargas, el posible candidato del PAN a la Gubernatura del Estado de México y apasionado por los camarones a la diabla, está maniobrando para poner a los suyos en las presidencias municipales.

Trascendió que todo va en combo familiar y de amigos en Teotihuacán, resulta Kike (aún alcalde de Huixquilucan) colocó a Deyanira Balandrano, como pre candidata por el PAN a la presidencia de ese municipio, Guillermo Galicia, cuñado de Balandrano quiere aparecer en la boleta como Síndico, también está Yuritzy Sánchez Hernández, hija de Álvaro Hernández, un ex presidente municipal priista que cobró en su gestión hasta por respirar el aire de Teotihuacán.

Kike y Balandrano, como pulpos de tentáculos finos, también gestionaron plaza para Vicente Rodríguez que busca la segunda regiduría y Leticia Valdés que va por la tercera regiduría, quien también es suplente de la presidente municipal Balandrano. Pero ahí no para el amiguismo, Alfredo Pérez López, pre candidato a la cuarta regiduría, es compadre de Guillermo Galicia el precandidato a síndico municipal priista.

Corre el rumor que lo peor es que esta plantilla de Kike Vargas está ligada al crimen organizado de la plaza, al cobro de derecho de piso, a la extorsión. Todo indica que el compadrazgo de Kike con la mafia local los está apadrinando.
No son buenas señales para el panismo en Teotihuacán en estos tiempos en donde la bandera partidista es impulsar a nuevos cuadros en los gobiernos municipales.

De concretarse esta pandilla teotihuacana, la maniobra le puede resultar como agua mala a Kike Vargas en el momento de sumar votos para su candidatura a la gubernatura del Estado de México. Aún hay tiempo para que el panismo estatal y nacional controle al príncipe de Huixquilucan, de lo contrario será su última aspiración política y sin carnada de pescado.

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