Reculan a revocación de Taboada
Como desde hace más de 25 años, el grupo político que encabeza el secretario de Gobierno, Martí Batres, fracasó en el territorio de la Benito Juárez, pues no pudieron movilizar a la gente y al ver que no conseguirían las 36 mil 911 firmas necesarias para llevar a proceso de revocación de mandato al alcalde Santiago Taboada, mejor recularon.
Mensaje Político
Alejandro Lelo de Larrea
Como desde hace más de 25 años, el grupo político que encabeza el secretario de Gobierno, Martí Batres, fracasó en el territorio de la Benito Juárez, pues no pudieron movilizar a la gente y al ver que no conseguirían las 36 mil 911 firmas necesarias para llevar a proceso de revocación de mandato al alcalde Santiago Taboada, mejor recularon.
El consejero electoral del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM), Bernardo Valle me confirma que sólo se registró la solicitud para la revocación de mandato a los alcaldes de Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe (PAN), y de los morenistas Armando Quintero, de Iztacalco, y José Carlos Acosta, de Xochimilco.
La estrategia de Batres y la burocracia de Morena en la Ciudad de México era primero debilitar al alcalde Taboada –puntero en la interna del PAN para la candidatura a la Jefatura de Gobierno– con acusaciones contra gente cercana a él, como su antecesor Christian Von Roehrich sobre quien pesa una orden de aprehensión, y luego contra algunos que fueron funcionarios de su administración.
Después de ello, armaron una campaña mediática con el tema del “cartel inmobiliario”, que le afectó muy poco, porque además la gente de Batres no logró permear el tema lo suficiente entre la ciudadanía de Benito Juárez. Acaso es reflejo de lo que dijo hace algún tiempo López Obrador, que Batres tiene ahí 25 años perdiendo ante el PAN.
Por eso es que ya no pudieron dar el siguiente paso, pues esperaban que a estas fechas la opinión pública de Benito Juárez estuviera molesta y prácticamente clamando la renuncia de Taboada. Y como no fue así, y hasta ha ganado simpatías en otras zonas de la ciudad que perciben una persecución política en su contra, ya no quisieron moverle más, porque sería victimizarlo y fortalecerlo.
La Constitución de la CDMX establece que transcurrida la mitad del mandato de los alcaldes se puede solicitar su revocación de mandato, para lo cual se requiere que firmen la solicitud el 10 por ciento de los ciudadanos de la Lista Nominal de Electores. El IECM ya resolvió que para el caso de Miguel Hidalgo se requieren 32 mil 049 firmas; para el de Iztacalco 35 mil 507, y para el de Xochimilco, 35 mil 557, que prácticamente ya han conseguido, pues este alcalde es el peor evaluado de la capital, además de que esa Demarcación es el penúltimo lugar en materia de seguridad, sólo detrás de Iztapalapa.
También va avanzando de manera acelerada la recolección de firmas para la revocación de Quintero y Tabe, éste último principalmente porque ha decepcionado en materia de seguridad ciudadana, que no logra contener a la delincuencia, a pesar de que gastó unos 2 mil millones de pesos en el plan “Blindar MH”. El tema se le puede complicar a Tabe porque en Miguel Hidalgo la gente ya empezó a acercarse a las mesas de solicitud de revocación que han colocado en algunas colonias populares, principalmente en aquellas que todavía apoyan al ex alcalde Víctor Romo, de Morena –por cierto, ambos no cantan mal las rancheras en el tema del cartel inmobiliario–.
El 8 de mayo es la fecha límite para que se entreguen las firmas. Después el IECM validará las firmas y si están bien emitirá una convocatoria para que se realice la consulta en máximo 70 días. Hoy, son reales las posibilidades de que se vayan a su casa Acosta, Quintero y Tabe. Lo veremos.
